¿Cómo definimos una generación samaritana (G.S.)?
Una Generación Samaritana la definimos como una persona que ha desarrollado la capacidad de sensibilizarse con el sufrir del otro .Ser un samaritano a diferencia del pasado, que era un despreciado y marginado en esta hora profética es alguien que con dignidad se presenta como parte de una generación capaz de detenerse al lado de uno que fue parte activa en la guerra contra el pecado y que por razones personales cayó en manos de sus enemigos que profundizaron en sus debilidades, y no solamente se detiene junto a el , no para solidarizar con sus heridas y sus causas sino para sanarle y restaurarle invirtiendo sus recursos interiores y lograr su reinserción en las filas de la iglesia triunfante.
Y, ¿Cómo reconocemos a un buen samaritano?
La Biblia nos enseña que el árbol se conoce por sus frutos, buen árbol buen fruto, mal árbol malos frutos, de esta misma manera un buen samaritano es conocido por sus actitudes que son el reflejo de sus recursos interiores, como la empatía ya que la Biblia dice que de la abundancia del corazón habla la boca, la fuente sustentable de la empatía es la sensibilidad del corazón, sufrir con el que sufre gozarse con aquel que dejo de sufrir, es saber a ciencia cierta es saber que el sufrir en forma negativa trae consigo el desgaste emocional y le acompaña la amargura de espíritu, acompañar al que sufre no por la razón de su sufrir, si no estar con la persona que sufre trae aliento y un buen samaritano es uno que si sabe cuanto vale una persona y lo tiene siempre presente.
Una Generación Samaritana la definimos como una persona que ha desarrollado la capacidad de sensibilizarse con el sufrir del otro .Ser un samaritano a diferencia del pasado, que era un despreciado y marginado en esta hora profética es alguien que con dignidad se presenta como parte de una generación capaz de detenerse al lado de uno que fue parte activa en la guerra contra el pecado y que por razones personales cayó en manos de sus enemigos que profundizaron en sus debilidades, y no solamente se detiene junto a el , no para solidarizar con sus heridas y sus causas sino para sanarle y restaurarle invirtiendo sus recursos interiores y lograr su reinserción en las filas de la iglesia triunfante.
Y, ¿Cómo reconocemos a un buen samaritano?
La Biblia nos enseña que el árbol se conoce por sus frutos, buen árbol buen fruto, mal árbol malos frutos, de esta misma manera un buen samaritano es conocido por sus actitudes que son el reflejo de sus recursos interiores, como la empatía ya que la Biblia dice que de la abundancia del corazón habla la boca, la fuente sustentable de la empatía es la sensibilidad del corazón, sufrir con el que sufre gozarse con aquel que dejo de sufrir, es saber a ciencia cierta es saber que el sufrir en forma negativa trae consigo el desgaste emocional y le acompaña la amargura de espíritu, acompañar al que sufre no por la razón de su sufrir, si no estar con la persona que sufre trae aliento y un buen samaritano es uno que si sabe cuanto vale una persona y lo tiene siempre presente.
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