Cada domingo hemos tenido celebraciones realmente de bendición, y este domingo no fue la excepción, de igual manera CEIM-Limache. CEIM-Quillota y CEIM-La Calera.En esta oportunidad, en CEIM-Quillota, nuestro Pastor Israel Codocedo compartió un mensaje de tremenda bendición, basado en la cita:
Mateo 8:23-27.-
23 Y entrando él en la barca, sus discípulos le siguieron.
24 Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.
25 Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: !!Señor, sálvanos, que perecemos!
26 El les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.
27 Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es éste, que aun los vientos y el mar le obedecen?
El momento en que Jesús, calma la tormenta al instante solo por poder de su palabra a fin de dar tranquilidad a sus hijos. Nuestro Pastor Israel Codocedo nos compartió que Dios reprende cada tormenta que nos amenaza cuando estas son tormentas que Él no ha enviado. Esencialmente existen dos tipos de tormentas a la que nos podemos ver enfrentados, tormentas de parte de Dios, y tormentas de parte del diablo. La primera tormenta es para probar nuestra fe y perfeccionar nuestro caracter, la segunda tormenta es para hacernos caer y fracasar. Lo importante es que Dios esta siempre dispuestos a cuidar a sus hijos, y reprende la tormenta que es de parte del diablo. Como tormenta podemos llamar alguna crisis de cualquier tipo, enfermedades, quiebres familiares, problemas, etcétera, Dios permite algunas de estas tormentas para perfeccionar nuestra fe, pero cuando hay desobediencia, producto de esto podemos atraer esta tormenta que no viene de parte de Dios.Este mensaje es una bendición, y si usted quiere recibir una bendición domingo tras domingo, le invitamos a ser parte de nuestras celebraciones en Limache, Quillota y La Calera, CEIM es un lugar para usted.
Dios le siga bendiciendo.