Vosotros sois la sal de la Tierra. Celebracion Domingo 21 de Diciembre de 2014, CEIM-Quillota


Mateo 5:13. Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.

El domingo 21 de diciembre 2014, en la sede de CEIM-Quillota, se vivió una celebración bendecida, con abundante gozo y fraternidad. Desde las alabanzas hasta la oración final, cada elemento fue una instancia de bendición de parte de Dios para su pueblo.

En esta oportunidad la prédica fue compartida por nuestro Obispo Justo Codocedo Ávila, y el mensaje central fue:

La biblia nos enseña que nosotros somos la sal de la Tierra, no solo la sal de la casa, ni la sal del trabajo o escuela sino la sal de la Tierra, en otras palabra el nos dice vosotros soy el sabor de la Tierra, ustedes son los encargados de saborisar la Tierra, que importante es la sal, en cualquier comida, y si esta pierde su sabor, de que sirve que exista, ya no sirve es solo un estorbo,

En los sacrificios en el A.T. la sal era utilizada como símbolo de un pacto permanente e incorruptible y era un requisito exigido que no debía faltar en las ofrendas. Esta, jugaba un papel de testigo puro dentro de los sacrificios que se presentaban a Dios.

La sal simboliza pureza, pues ayuda a que los alimentos no se dañen. En el sur de nuestro país la carne no necesitan estar refrigerados para evitar contaminarse, pues están revestidos de mucha sal, lo cual evita su descomposición.

Así como la sal estaba presente en las ofrendas del A.T. y era símbolo de pureza y de un pacto permanente, nosotros como “la sal del mundo” tenemos la función de presentarnos en santidad y testificar del nuevo pacto eterno cuya fundación es en Cristo Jesús.
Pero, ¿que pasa cuando se disponen los deseos personales antes que la voluntad de Dios, y no se cumple con la labor de salar?

Mateo 5:13 Pero si la sal pierde su sabor ¿conque será salada? No sirve para nada, sino para ser echada fuera y pisoteada por los hombres

La sal de mesa, está compuesta  por cloruro de sodio en un 98 % y el resto por algunos aditivos químicos. Este compuesto químico es estable, así que, ¿cómo puede dejar de estar salada? La propiedad química de salar no se pierde, pero si se modifica.

Cuando se experimenta, con diferentes sabores para crear uno distinto, agri-dulce, salado-dulce, salado-agrio, y así se obtiene un sabor híbrido de dos otros sabores originales. Ahora, imagina que mezclas un poco de sal con  limón viejo,  este jugo no solo es amargoso, no sirve para usarlo en algo. La sal que deja de estar salada:

Lucas 14.34-35
34 Buena es la sal; más si la sal se hiciere insípida, ¿con qué se sazonará? 35 Ni para la tierra ni para el muladar es útil; la arrojan fuera. El que tiene oídos para oír, oiga.
Así también pasa con  nosotros cuando permitimos contaminarnos con los sabores amargos, rancios, dañinos y corruptos, como el engaño, la envidia, mentira, rencor, ira, obscenidad, libertinaje, ambición, etc.

Como humanos, por nuestra naturaleza pecadora tendemos a hacer lo malo; sin embargo, El Señor en su palabra nos invita más de una vez a seguir firmes,

Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

 Apocalipsis 2:10b
10 No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

Ser sal del mundo significa, entre otras cosas,
Vivir en santidad, Dar testimonio del pacto eterno de Dios con los hombres que se ha hecho por medio de Jesucristo, Ser instrumento usados por Dios para preservar al mundo de corrupción a través de Su palabra, Y mantener la pureza en nosotros evitando los malos deseos del mundo. El ser sal del mundo, nos enseña la influencia que tenemos en la sociedad de manera positiva a través del evangelio. 

1 Juan 2:17  y el mundo pasa y sus deseos pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.-

Cada celebración en CEIM-Quillota ha resultado en testimonios de gratitud, sanidad, restauración, de las cuales le invitamos para que sea partícipe de las bendiciones de Dios. Le invitamos a nombre cordialmente a acompañarnos en nuestra sede ubicada en Zorobabel Rodríguez N°1615, Población San Martín, Quillota. Le esperamos.