Joel 2:17
Entre la entrada y el
altar, lloren los sacerdotes ministros de Jehová y digan: perdona oh jehová a tu pueblo, y no entregues al oprobio tu heredad, para que
las naciones se enseñoreen de ella, ¿Por qué que han de decir entre los
pueblos: Donde está su Dios?

En esta oportunidad la prédica fue compartida por nuestro Pastor
Oscar Valencia y el mensaje central fue:
Muchas veces muna nación no merece, pero cuando ese pueblo
se humilla, e inclina su corazón, Dios desde el
cielo escuchara y tendrá
misericordia.
Joel dice que hay un
llamado para los ministros
y sacerdotes del altar, buscar y colocarse a la brecha por nuestro país, hogares,
iglesia, tenemos una responsabilidad y es llevar la luz, ser sal.
Necesitamos clamar por otros, su presencia debe permanecer
en cada uno de nosotros, debemos ser
vigilantes, debemos volvernos con todo
nuestro corazón, y clamar no
debemos permitir que nuestra lámpara se
apague.
Ayudemos al señor a santificar nuestro altar.
El pueblo de Israel
se había desviado, y el señor le dice, yo no iré contigo, pero Moisés le dice,
si tu presencia no va con nosotros, no quiero ir a ninguna parte, y Moisés
no se movió.
Eso debemos anhelar,
su presencia, no movernos si él no
está conmigo.
Necesitamos movernos
al altar, movernos a él, para que
derrame en nosotros aceite, pan, con
ayuno, lloro y lamento, humillándose
delante de Dios.
La mejor ofrenda que
tenemos para Dios es nuestro corazón santo y limpio.-
Cada celebración en CEIM-Limache ha resultado en testimonios
de gratitud, sanidad, restauración, de las cuales le invitamos para que sea
partícipe de las bendiciones de Dios. Le invitamos a nombre cordialmente a
acompañarnos en nuestra sede ubicada en Avenida Urmeneta 403. Limache. Le
esperamos.