El Obispo
Justo Codocedo compartió el mensaje de parte de Dios el pasado 18 de
septiembre, fue un tiempo donde Dios nos insta a despertar. Para esto nos lleva
al libro de Esdras.
1 En el primer año de Ciro
rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de
Jeremías, despertó Jehová el
espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pregonar de palabra y también
por escrito por todo su reino, diciendo:
2 Así ha dicho Ciro rey de
Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra,
y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá.
3 Quien haya entre vosotros de
su pueblo, sea Dios con él, y suba a Jerusalén que está en Judá, y edifique la
casa a Jehová Dios de Israel (él es el Dios), la cual está en Jerusalén.
4 Y a todo el que haya quedado,
en cualquier lugar donde more, ayúdenle los hombres de su lugar con plata, oro,
bienes y ganados, además de ofrendas voluntarias para la casa de Dios, la cual
está en Jerusalén.
Ciro, rey de Persia era un sanguinario y
estaba programado desde el vientre de su madre para ser un asesino, programado
por Satanás príncipe de las tinieblas. El espíritu que gobernaba a Ciro era el
mismo que obstruyó la oración de Daniel por 21 días.
Jeremías es reconocido como la parte más
sensible del corazón de Dios, y como un profeta de Dios.
A pesar de quién era Ciro, hay alguien mucho
mayor que quien gobierna una ciudad, y ese es Dios.
Los demonios nos han programado para pecar,
pero el infierno se retuerce cuando Dios despierta nuestro espíritu.
Cuando hay un espíritu despierto se toman
decisiones asombrosas, cuando una persona canta, danza, predica, enseña y
ofrenda despierta, es otra la historia, si hemos caído en un estancamiento es
porque estamos dormidos.
Cuando estamos dormidos le echamos la culpa a
todos de lo que pasa, y nos convertimos en muertos vivientes y un muerto
viviente transforma a su familia en muertos vivientes, y un despierto convierte
a su familia en seres vivientes.
Dios despierta nuestro espíritu para que
tomemos decisiones de fe, Dios despierta nuestro espíritu para que veamos y
escuchemos lo que no podemos ver ni escuchar con los ojos y oídos del alma.
Dios despierta nuestro espíritu para que pasemos de cobardes a valientes. Los
cobardes huyen y los valientes arrebatan el reino.
Acontinuaciòn les mostramos algunas imàgenes de nuestro domingo, para ver mas fotos les invitamos a revisar nuestro facebook CEIM-CHILE.